Redacción – La reclamación de una amnistía para los encausados por el ‘procés’ se ha transformado hoy en el elemento principal de consenso del independentismo en la calle, en una Diada con una participación ciudadana inferior a la de convocatorias anteriores. Barcelona, 11 de septiembre de 2023.
En la edición actual, la Guardia Urbana ha reducido el número de asistentes a la manifestación independentista de la Diada, pasando de 150.000 a 115.000 personas, lo cual está muy por debajo de los números de 2019, antes de la aparición del coronavirus, cuando alcanzaron los 600.000 manifestantes. Los datos proporcionados por la ANC difieren significativamente: 800.000 personas se manifestaron, cien mil más que el año pasado, una cifra que contrasta con la falta de movilización independentista reflejada en los resultados electorales más recientes.
La Diada ha vuelto a evidenciar las divergencias estratégicas entre los independentistas, desde los llamamientos de ERC, JxCat y Òmnium Cultural a negociar perdón y autodeterminación, hasta las reservas de la ANC y la CUP respecto a cualquier acuerdo con el Estado.
El enfoque en el perdón es lo que más se acerca a un plan compartido, también respaldado por los comunes, aunque la negociación para investir al presidente del Gobierno genera una fuerte preocupación en la ANC.
En el final de la marcha, en la plaza Espanya -que la Asamblea Nacional Catalana (ANC) desea renombrar como plaza Primero de Octubre-, su presidenta, Dolors Feliu, ha aprovechado el evento político para advertir a JxCat y ERC que solo apoyará un acuerdo en Madrid que involucre dar pasos hacia la proclamación efectiva de la independencia de Cataluña.
«Independencia o bloqueo de cualquier pacto que no sea la independencia. Independencia o nada. Independencia o elecciones», ha proclamado Feliu, en una clara advertencia dirigida a ERC y JxCat.
Mientras se desarrollaba el evento de la ANC, en otra parte de la ciudad se llevaba a cabo la tradicional manifestación de la CUP, que ha comenzado con críticas a ERC y JxCat por «negociar migajas en Madrid» al igual que «la antigua Convergència».
ESTA VEZ ARAGONÈS Y ERC SÍ PARTICIPAN EN LA MANIFESTACIÓN
Tras la renuncia de ERC el año pasado a participar en la manifestación debido a la crítica tonalidad de la ANC hacia la estrategia de diálogo, en esta ocasión los republicanos sí se han sumado a la convocatoria, aunque Oriol Junqueras no ha podido asistir por estar contagiado de covid.
Uno de los asistentes fue el presidente catalán, Pere Aragonès, junto a otros miembros del Govern y de la dirección de ERC.
Durante la marcha, escucharon gritos de «Dimisión del Govern» y de apoyo para levantar la suspensión de la declaración unilateral de independencia de 2017, por parte de un pequeño grupo de personas, al cual otros manifestantes respondieron coreando «Independencia».
En un evento previo de ERC, Aragonès advirtió a los poderes del Estado que la amnistía es el «primer paso» hacia la celebración de un referéndum.
LOS MATICES DE JXCAT ANTE LA NEGOCIACIÓN
Consciente de que todas las miradas se centran en los movimientos de JxCat, crucial para una posible investidura de Pedro Sánchez, el secretario general de Junts, Jordi Turull, hizo un llamamiento a «no caer en la ingenuidad en la negociación de cualquier asunto» con el Estado y advirtió que su partido «no renunciará a nada».
La presidenta de JxCat, Laura Borràs, afirmó que los ciudadanos no solicitan una investidura, sino la independencia, y advirtió que los votos de su partido se utilizarán «para resolver el conflicto», no para «respaldar gobiernos españoles».
LAS POSICIONES DE PSOE Y PP
Desde Madrid, la vicesecretaria general del PSOE y ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, advirtió que el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont está en una «posición máxima».
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, defendió responder al «desafío separatista» y las posibles concesiones de Sánchez ante el independentismo catalán desde todos los «rincones», desde las ciudades hasta los parlamentos autonómicos, las Cortes e incluso la Justicia.
ÒMNIUM PONE UNA CIFRA A LAS PERSONAS A «AMNISTIAR»
Òmnium Cultural ha llevado a cabo una convocatoria exclusiva, en la cual su líder, Xavier Antich, ha instado a aprovechar el hecho de que el separatismo posee el control sobre la investidura para «concretar» los acuerdos en torno a la liberación y el derecho a decidir: «La suma de votos nos favorece y no podemos desaprovechar esta ocasión».
Según Antich, en la actualidad existen «más de 4.400 individuos afectados» y, específicamente, un total de 1.432 han sido «juzgados, sancionados o examinados» por asuntos que «no constituyen ningún delito, sino el ejercicio de derechos fundamentales» y que solo pueden solucionarse mediante una amnistía.
Los mensajes del PSC y los Comunes en la ofrenda a Rafael Casanova. Las celebraciones de la Diada han comenzado por la mañana con la tradicional ofrenda al monumento a Rafael Casanova, desde donde el primer secretario del PSC, Salvador Illa, ha delineado los «cuatro puntos básicos» de su partido frente a las negociaciones de investidura: «Paciencia, discreción, prudencia y Constitución».
Jéssica Albiach, la líder de En Comú Podem en el Parlament, ha resaltado que esta Diada simboliza un «cambio significativo» para un «inicio fresco» en Cataluña por medio de una amnistía.
CONVOCATORIAS ALTERNATIVAS DE CS Y PPC
Desde Tarragona (El Vendrell), donde ha participado en un acto de homenaje a la estatua dedicada al violoncelista Pau Casals, el líder del Partido Popular de Cataluña, Alejandro Fernández, ha exhortado al separatismo a «renunciar a comenzar una segunda fase» del ‘procés’.
De acuerdo con lo explicado en una conferencia de prensa en Barcelona, el eurodiputado de Ciudadanos, Adrián Vázquez, ha remitido una carta a la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, con el fin de solicitarle que suspenda de empleo y sueldo y retire temporalmente el cargo a los tres eurodiputados de JxCat, Carles Puigdemont, Antoni Comín y Clara Ponsatí, así como también al de ERC, Jordi Solé.
